El olor del hedor.

Sí.

Puedes follarme el cuerpo y la mente con un bisturí de pétalos las veces que quieras. Aunque te escupa y al cristalizarse mi saliva aparezca la palabra No.

Pero nunca tendrás la verdad.

Podría ser la estufa donde calientes las manos agrietadas de cocer ligamentos y estruendos. Una estufa que emita frio.

No    No              No                quiero que te vayas.Qui
No        No          No               be                            ero                 
No               No   No               ber                            ju                               
No                       No               te                              gar
No quiero mendigar por un hacha, partirte las costillas y que floten mil palabras que se claven en mis sienes ,mis sienes pringosas de ti.Mil palabras malsonantes malolientes maldicientes malentendidas malinterpretadas malformadas malhabladas maldecidas malditas malnacidas malhumoradas malintencionas malvadas maliciosas m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-m-me-me-me-me-memento-melancolía-me-me-me-me
Merezco atragantarme con el sabor de tu adiós.
Morir debajo de tu reminiscencia.
Renacer en los ojos cerrados de alguna incognita.

Quiero ser caníbal. Prometo que esta noche no seré tan cruel contigo, conmigo.

Y quiero hacerle el amor a un tenedor lleno de tomate de los espaguetis de la última cena de la última noche, del último instante.
En cada arcada, asqueado y fatigado intento vomitar cada astucia programada por tus manos. Pero solo me sale un porqué.
A las 3 de la tarde se hace de noche.

Y entonces sacas tu bisturí con cuchillas de pétalos y empiezas a follarme de nuevo, como si no hubiese despedida.

Pero la hay. Y está aquí. En cada Hola.