No
quiero mirar a nadie para sentirme libre de responsabilidad
para poder qué se yo, ser feliz, por poner un ejemplo.
No quiero desatender cuestiones imprescindibles como
qué pasa aquí dentro, entre estos hemisferios que
soy incapaz
de localizar
Norte
Izquierdo
Derecho
Sur
Por qué me planteo compararme con el mundo, perderme
en la nada, destripar la soledad como si no fuera lo más importante
Pensar que la naturaleza acecha, cuando son otros
poderes los que debo erradicar- aunque no lo quiera saber- demasiado bien
lo interpreto
Lo fácil es más aconsejable, porque de alguna forma
llegué al mundo sin esfuerzo alguno - si, salí al mundo sin forzar la mente,
aunque para los átomos fue un verdadero trauma.
¿Qué tal si por un día dejo la razón apagada? Si por
un día, dejo que la intuición se presente como forma letal de acción. ¿Qué tal
si dejo que se exprese el ser que todo poco le importa, pues forma parte de
algo más grande? ¿Que tal si dejo de dejarme la piel por un sucedáneo de
estabilidad?
Río y lloro, da
igual, lo que aprendo vale para olvidar, para sentir la serenidad de que todo y
poco es lo mismo, es esta voz, este temblor, es la fisura por la que se
derrama la sangre y el fuego – lo que me
mueve- lo que renace, lo que mata a la vez que muere.
¿Qué es la revolución? aparte de darle al destino lo
que es suyo.